PERU: Apagón por el planeta

La Plaza de Armas y la plaza San Martín se apagarán hoy a las 8:30 de la noche y, durante una hora, esas luces que cada día le dan un aspecto majestuoso a los edificios y monumentos más representativos del Centro Histórico de Lima dejarán de alumbrarlos. También se quedarán sin luz la cruz del cerro San Cristóbal; la iglesia Inmaculado Corazón de María, de Magdalena; centros comerciales como el Jockey Plaza; bancos y letreros publicitarios. Además, apagarán sus luces ciudades como Trujiilo, Tacna, Tarapoto, Iquitos, así como distritos y pueblos de Ayacucho, Puno, Cusco, Huánuco y Arequipa.

¿Se trata de un apagón nacional?. En cierta forma sí, pues este año el Perú se ha unido a la campaña mundial La Hora del Planeta, una iniciativa del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF por sus siglas en inglés) que surgió en Sidney, Australia, en el año 2007, y que ahora se ha extendido a 2,848 ciudades de 84 países en todo el mundo.

La campaña mundial busca darle un respiro a la Tierra y, al mismo tiempo, llamar la atención sobre la grave situación que atraviesa nuestro planeta debido al calentamiento global.

COMPROMISO. La invitación para esta cruzada es general. No se trata de que se queden sin luz solo los monumentos y edificios comerciales, sino que cada uno de nosotros apoyemos la iniciativa apagando las luces de nuestra casa y los aparatos eléctricos que no son indispensables. Así, contribuiremos a reducir las emisiones de gases contaminantes responsables del calentamiento global. “Pero no solo se debe apoyar la campaña por una hora. Buscamos que la gente se dé cuenta cómo sus acciones afectan al planeta y se comprometa a disminuir su consumo de energía. Todos podemos reducir el impacto negativo en la Tierra del uso indiscriminado de recursos”, dice Michael Valqui, director del Programa Amazónico de WWF Perú.

El compromiso no debe quedarse solo en reducir el consumo de energía eléctrica –agrega Valqui– también tenemos que cuidar el agua y reciclar aquello que ya no usamos. “El Perú es uno de los países más vulnerables al calentamiento global”, señala.

Cosas tan simples como desconectar por la noche el televisor y todos los aparatos que tienen stand-by, no usar la plancha en horas punta –entre 6 y 11 de la noche–, abrir la refrigeradora solo cuando es necesario y por un corto tiempo o no dejar prendido el monitor de la computadora son algunas costumbres que tenemos que aplicar en nuestra vida diaria para ahorrar energía, reducir la cuenta de luz y no seguir maltratando al planeta.