El suboficial de la Marina de Guerra que colabora con la Fiscalía en el caso “chuponeo’ telefónico, Martín Fernández Vírhuez, sigue haciendo importantes revelaciones. El 18 de febrero, ante la junta de la Marina que lo investiga por sus vínculos con la empresa Business Track (BTR), Fernández dijo que “así como me procesan a mí, también investiguen a los altos oficiales que visitaban las oficinas de BTR”. Enseguida, precisó que los oficiales iban a ver al dueño de la compañía, Elías Ponce Feijoo.
“Si se me pretende sancionar por haber ingresado y salido de la citada empresa (BTR), ya que no tienen ninguna prueba sobre mi vínculo laboral, (...) entonces también se debería investigar a aquellos oficiales de alto mando que visitaron, entre los meses de noviembre a diciembre, la empresa Business Track, a fin de preguntarles las razones y motivos por lo que ingresaron”, fue lo que señaló.
Según fuentes de este diario, su versión quedó registrada en la transcripción de la manifestación que la junta de investigación de técnicos y oficiales de la Marina levantó ese día en el penal Castro Castro, donde Fernández está recluido.
Al día siguiente, 19 de febrero, el marino fue dado de baja con una resolución directoral firmada por el director de Personal de la Armada, almirante Carlos Tejada Mera. Fernández estaba extrañados por la velocidad de la decisión. Hoy, su defensa presentará al alto mando de la Marina una apelación a la medida de baja.
INTERROGANTES. Las preguntas que surgen ahora son: ¿quiénes son los oficiales de “alto mando” a los que se refiere Fernández? ¿Qué temas iban a tratar con Ponce Feijoo? ¿Conocía esto la Comandancia de la Marina?
Lo cierto es que estas declaraciones no solo han sido incómodas para los directivos de Business Track, sino también para la propia Armada. Como se recuerda, hace una semana, el abogado de Fernández, Walter Chinchay Carbajal, emplazó al comandante general de la Marina, almirante Rolando Navarrete, a esclarecer qué uso le dio esa institución a sus equipos de espionaje telefónico. Sin duda, Fernández y su defensa han resultado respondones. Pero más allá del detalle, la institución debería investigar este hecho para deslindar responsabilidades.
EMPRESAS DE SEGURIDAD. Business Track no será la única empresa de seguridad privada bajo investigación. La comisión parlamentaria que investiga el “chuponeo’, presidida por el congresista Oswaldo Luizar, iniciará hoy sus indagaciones a otras empresas del rubro, en particular a las integradas por oficiales en retiro de la Marina.
Hoy se presentará ante esa comisión el capitán de navío® Erick del Águila, representante de la compañía Andrick Service. Según trascendió, ejecutivos de otras empresas desfilarán por el Congreso en los siguientes días.
De acuerdo con fuentes parlamentarias, una de las hipótesis de la comisión sería la posible relación entre la Marina y las empresas de seguridad a cargo de marinos. Sobre este presunto vínculo hay opiniones distintas.
El experto en temas de seguridad del Instituto de Defensa Legal, José Robles, dijo a Perú.21 que no le parecía coincidencia que la mayoría de compañías de seguridad sean de marinos en retiro, y se preguntó cuántos de ellos serían especialistas en inteligencia.
“¿Quién regula el trabajo de estas empresas? La Marina haría mal en negar tajantemente una relación que se hace obvia. No me cierro a la posibilidad de esos vínculos”, afirmó Robles.
Por su parte, el almirante® Jorge Montoya dijo que lo que se debe descubrir es quiénes contrataron a BTR, y consideró que vincular a la Marina con el “chuponeo’ era “irresponsable” y “una falta de respeto” a la institución
PERU: Un marino reveló que altos oficiales navales visitaban Business Track
lunes, 2 de marzo de 2009Etiquetas: BTR, BUSINESS TRACK, CHUPONEO, CORRUPCION, MARINO, NAVAL, NEWS, NOTICIAS, PERU
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario