PERU: Kiss hizo vibrar a más de 30 mil fanáticos en el Estadio Nacional

miércoles, 15 de abril de 2009









La legendaria banda estadounidense Kiss hizo vibrar a más de treinta mil fanáticos en el Estadio Nacional. El espectáculo se inició a las 9 p.m. con fuegos artificiales, tecnología de punta, y saludos en español.

“Buenas noches Lima, esta noche es la noche”, expresó Paul Stanley, guitarrista y vocalista de la banda, tras ser aclamado por cientos de seguidores vestidos de negro y con caras pintadas.

El vocalista Paul Stanley, el bajista Gene Simmons, el baterista Eric Singer y el guitarrista Tommy Thayer iniciaron el concierto con la canción “Deuce”.

Luego le siguieron los clásicos como “Hotter Than Hell”, “C’Mon and love me”, “Cold gin”, “Rock&Roll all nite”, “Lick it up” y “I was made for lovin’ you”, temas que fueron cantados con ferviente devoción por los fanáticos.

En efecto, fue la noche más esperada de los últimos tiempos para incontables fanáticos del rock and roll: Kiss, la banda liderada por Paul Stanley y Gene Simmons, se presentó anoche con toda su parafernalia, su pirotecnia y, sobre todo, su inoxidable catálogo de clásicos ante un público limeño que transpiró con entregado entusiasmo desde muy temprano en el Nacional. Algunos eran muchachos del ayer que crecieron y fueron felices durante sus años de adolescencia con las canciones de este cuarteto de muñecos diabólicos; otros eran más bien jóvenes, aunque igual conocían de memoria las letras de temas como “Strutter”, “Cold Gin”, “Parasite” y un etcétera tan incendiario como memorable, interpretados con el mismos vigor del pasado y la renovada consistencia de una actualidad que, como pudo comprobarse, ha consolidado a Kiss como una de las pocas megabandas de la era dorada del rock pesado que sobreviven con absoluta dignidad.

Fue un espectáculo sensacional (calentó los motores Leusemia), que dejó una huella indeleble en el corazón y los tímpanos de las más de 30 mil personas que llegaron al coloso de la calle José Díaz. Que les den los laureles deportivos, por favor.

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